10 Trucos para estar explendida

Bicicleta matutina: Pon el despertador cinco minutos antes. En cuanto suene y te despiertes, levanta las piernas en el aire y haz cinco minutos de bicicleta. Esto mejorará tu circulación, previniendo las varices y dándote energía antes de ponerte en pie.
Aguas mil: No salgas de casa sin una botella de agua para asegurarte de que bebas lo suficiente a lo largo del día (de seis a ocho vasos, como mínimo). Cuando el agua te acompañe en todo momento, verás cómo mejora tu cutis, tu digestión…
Descanso al cuerpo: Si trabajas sentada en una oficina y levántate por lo menos cada hora. Estira los brazos, el cuello. Mientras trabajas, puedes estirar los gemelos levantando un poco las piernas y apuntando los dedos hacia el cuerpo.
Aire libre: Puede que no tengas ni tiempo ni dinero para apuntarte a un gimnasio, pero todo el mundo puede incorporar 20 minutos de ejercicio en su día – y mejor si es al aire libre. Necesitas la luz del sol para asimilar la vitamina E.
Comida sana: No comas hasta reventar; come un poco menos, y te sentirás mucho mejor. Para asegurarte de que estás llevando una dieta equilibrada, apunta las porciones que debes comer cada día y mantén la cuenta. Por ejemplo, sabes que debes comer por lo menos cuatro o cinco porciones de verdura o fruta al día. Pon «frutas y verdura» en un papelito, seguido de cinco recuadros. Cada vez que comas una porción de fruta o de verdura, márcalo en el papel y así verás si estás cumpliendo con la dieta.
Muchas gracias: Busca una cosa cada día por la que estar agradecida. Notarás la diferencia en tus ánimos.
Misión belleza: ¿Te has estado desatendiendo últimamente? Desarrolla tu propio plan de belleza: cada cuánto cortarte el pelo, aplicar una mascarilla facial, pintarte las uñas... ¡Mímate un poco!
Tus colores: Compra ropa sólo de los colores que mejor te queden, y aplica el mismo principio al maquillaje. Todas tenemos diferentes tonalidades de piel, de cabello, de ojos, y sin duda, algunos colores nos quedan mejor y otros peor. Puedes ir a una consulta profesional o leer un libro como El color de tu belleza. Cuando llevamos los colores que nos sientan bien, ¡nos sentimos bien!
Dos veces: Lávate la cara por la noche, no sólo por la mañana. Por cansancio, es fácil saltarse este paso. Pero es vital para mantener el cutis en perfecto estado y mucho más resplandeciente.
¡A la cama!: Por agotamiento y aburrimiento, nos quedamos viendo la televisión por la noche, pero esto no nos ayuda a descansar. Apaga la tele y acuéstate. Necesitas ese sueño reparador que te ayudará a sentirte mucho mejor por la mañana.